Beowulf llega este viernes a las salas mexicanas con el antecedente de debutar como la número uno en taquilla en EU, el estreno más importante de cine tridimensional al recaudar poco más de 28 millones de dólares durante los primeros tres días de exhibición.
Esta película, que narra la historia de Beowulf (Ray Winstone), un guerrero en busca de gloria y poder, cuenta con diversos elementos que la hacen muy atractiva: posee las últimas innovaciones en 3D, un revolucionario sistema de animación digital denominado “captura de actuación”, una buena dosis de acción, y un elenco que incluye a Angelina Jolie, Anthony Hopkins y John Malkovich.
Ubicada alrededor del siglo VI, Beowulf es un vikingo que rescata al reino de Hrothgar (Anthony Hopkins) del temible monstruo, Grendel (Crispin Glover), quien tiene aterrorizados a sus habitantes, sin saber que después de darle muerte, se enfrentará a la ira de su madre (Angelina Jolie), que está en busca de venganza.
“Lo que me llamó la atención del personaje es este hombre hambriento de poder, riqueza y fama, que es lo que al final lo consume. Él es un monstruo en muchos sentidos al igual que los demonios que enfrenta”, explicó Winstone. Gracias a la “captura de actuación”, Winstone, de 50 años de edad, luce un atlético cuerpo que sugeriría horas de entrenamiento y ejercicio, pero la realidad es que al igual que los demás actores del elenco tuvo que utilizar un ajustado traje de licra, similar al de los surfistas, repleto de sensores por todo el cuerpo incluida la cara, para escanear de manera exacta sus gestos y movimientos. En el caso de Angelina Jolie, le permitió lucir una curvilínea figura, aun cuando tenía tres meses de embarazo, ya que las secuencias fueron filmadas en 2005, y tuvo la oportunidad de sugerir algunos aspectos de la imagen de su personaje en el que aparece desnuda cubierta por oro líquido y con una larga cola de reptil formada a partir de su cabello.
“Me sentí un poco apenada; me gustó mucho cómo luce mi cuerpo, en especial mi cola”, dijo entre risas Jolie, quien durante la conferencia de prensa portaba una ceñida blusa blanca que dejaba al descubierto su extremada delgadez, lo que podría callar los rumores sobre un posible segundo embarazo. Anthony Hopkins, el rey Hrothgar, explicó que con esta tecnología sólo trabajó durante ocho días en la filmación, e incluso pudo proponer que su personaje utilizara un acento danés, para darle un toque antiguo y acorde a la época en que se ubica la historia.
“Soy un actor profesional… me pareció una buena historia, no soy tan vanidoso y no me preocupó utilizar ese traje y esos sensores en la cara, ni cómo luciría”, comentó ante la pregunta del porqué de su participación en Beowulf y agregó con sarcasmo que no le costó trabajo interpretar a un rey que se la pasa borracho.
Las actuaciones fueron capturadas en un estudio vacío por cerca de 40 cámaras infrarrojas suspendidas en todos los lados y después se envió a las computadoras para construir sets tridimensionales y manipular las escenas de manera digital, lo que permitió cambiar escenografías, paisajes, vestuario, y la figura humana, como la edad, el cabello y color de piel de los personajes.
El productor Steve Starkey expresó que utilizar nuevamente la tecnología de “captura de actuación” fue la mejor manera de contar esta historia, y aunque no se requirió gastar en maquillaje, caracterización, vestuario o escenografías, la inversión fue igual de costosa porque se necesitaron softwares especializados, por lo que el costo fue de 150 millones de dólares y llevó dos años de posproducción
Esta película, que narra la historia de Beowulf (Ray Winstone), un guerrero en busca de gloria y poder, cuenta con diversos elementos que la hacen muy atractiva: posee las últimas innovaciones en 3D, un revolucionario sistema de animación digital denominado “captura de actuación”, una buena dosis de acción, y un elenco que incluye a Angelina Jolie, Anthony Hopkins y John Malkovich.
Ubicada alrededor del siglo VI, Beowulf es un vikingo que rescata al reino de Hrothgar (Anthony Hopkins) del temible monstruo, Grendel (Crispin Glover), quien tiene aterrorizados a sus habitantes, sin saber que después de darle muerte, se enfrentará a la ira de su madre (Angelina Jolie), que está en busca de venganza.
“Lo que me llamó la atención del personaje es este hombre hambriento de poder, riqueza y fama, que es lo que al final lo consume. Él es un monstruo en muchos sentidos al igual que los demonios que enfrenta”, explicó Winstone. Gracias a la “captura de actuación”, Winstone, de 50 años de edad, luce un atlético cuerpo que sugeriría horas de entrenamiento y ejercicio, pero la realidad es que al igual que los demás actores del elenco tuvo que utilizar un ajustado traje de licra, similar al de los surfistas, repleto de sensores por todo el cuerpo incluida la cara, para escanear de manera exacta sus gestos y movimientos. En el caso de Angelina Jolie, le permitió lucir una curvilínea figura, aun cuando tenía tres meses de embarazo, ya que las secuencias fueron filmadas en 2005, y tuvo la oportunidad de sugerir algunos aspectos de la imagen de su personaje en el que aparece desnuda cubierta por oro líquido y con una larga cola de reptil formada a partir de su cabello.
“Me sentí un poco apenada; me gustó mucho cómo luce mi cuerpo, en especial mi cola”, dijo entre risas Jolie, quien durante la conferencia de prensa portaba una ceñida blusa blanca que dejaba al descubierto su extremada delgadez, lo que podría callar los rumores sobre un posible segundo embarazo. Anthony Hopkins, el rey Hrothgar, explicó que con esta tecnología sólo trabajó durante ocho días en la filmación, e incluso pudo proponer que su personaje utilizara un acento danés, para darle un toque antiguo y acorde a la época en que se ubica la historia.
“Soy un actor profesional… me pareció una buena historia, no soy tan vanidoso y no me preocupó utilizar ese traje y esos sensores en la cara, ni cómo luciría”, comentó ante la pregunta del porqué de su participación en Beowulf y agregó con sarcasmo que no le costó trabajo interpretar a un rey que se la pasa borracho.
Las actuaciones fueron capturadas en un estudio vacío por cerca de 40 cámaras infrarrojas suspendidas en todos los lados y después se envió a las computadoras para construir sets tridimensionales y manipular las escenas de manera digital, lo que permitió cambiar escenografías, paisajes, vestuario, y la figura humana, como la edad, el cabello y color de piel de los personajes.
El productor Steve Starkey expresó que utilizar nuevamente la tecnología de “captura de actuación” fue la mejor manera de contar esta historia, y aunque no se requirió gastar en maquillaje, caracterización, vestuario o escenografías, la inversión fue igual de costosa porque se necesitaron softwares especializados, por lo que el costo fue de 150 millones de dólares y llevó dos años de posproducción
